Carla Simón ha hecho su película más política. Su nombre, Romería , no aparenta serlo. Su sinopsis, tampoco. La trama, basada una vez más en la vida de la cineasta, retrata el viaje de Marina a Vigo. Un viaje físico y emocional que, disfrazado con el objetivo de conseguir una beca, es en realidad una excusa para conocer al padre que nunca conoció, llenar esa memoria llena de vacíos , de preguntas, misterios y sombras.
El padre de la protagonista, como el de Simón, murió de b en los 80. Ni directora ni personaje llegaron nunca a conocerlo. ¿Por qué? La historia de Simón es personal, la de Marina es ficcionada, pública y también compartida por muchos . Marina se topa con un padre que no conoce y que apenas va a poder conocer. El relato de su familia paterna ofrece versiones contrad