Un falso odontólogo, de nacionalidad venezolana, montó un consultorio en la localidad de Suba, en el noroccidente de Bogotá. Sin ninguna clase de autorización o vigilancia, realizaba procedimientos invasivos a bajo costo, lo que garantizaba clientes y víctimas.
De acuerdo con la investigación de la Fiscalía, el falso odontólogo abusó de una menor de edad que había asistido en varias oportunidades al improvisado consultorio. Se ganó la confianza de la familia y aprovechó el espacio para abusar de la menor, en distintos eventos y vejámenes.
“La víctima, que frecuentaba en compañía de su mamá el establecimiento en el que el hombre ofrecía los servicios médicos de manera informal, acudió sola el 1 de diciembre de 2024, para avanzar en un tratamiento que le realizaban”, señaló la Fiscalía a