Un changarín de 31 años fue condenado ayer por el juez, Pablo León, a 8 años de cárcel por haber violado a su primo cuando era menor (entre los 7 y los 11 años). Y durante 14 años, entre los 7 y los 21 años, a su propia hermana con un grave cuadro de salud mental (le diagnosticaron esquizofrenia, bipolaridad y epilepsia).
El sujeto castigado no es mencionado para preservar a las víctimas, se convirtió en el segundo en recibir una pena por haber atacado a la joven con problemas mentales. El lunes pasado, el abuelastro de la chica, un pensionado de 70 años con diabetes, hipertensión y trombosis, había admitido también que violó dos veces a esa chica (en noviembre de 2024 y enero pasado), y recibió 8 años de cárcel.
Ambos casos cerraron con un juicio abreviado pactado entre el fiscal coordi