Las festividades de Año Nuevo traen consigo un tiempo perfecto para descansar. Para muchos, este período es sinónimo de viajes, piscina, sol y relajación. Estos elementos deben atenderse para cuidar la salud vascular.

El doctor Alberto Muñoz Hoyos, especialista en cirugía vascular y endovascular, destaca que las altas temperaturas y los viajes prolongados pueden tener un impacto significativo en la salud venosa, especialmente en quienes ya presentan insuficiencia venosa, “el calor dilata las venas y las arterias, lo que exacerba los síntomas en personas con daños venosos, como edemas y dolor,” explica.

Además, la deshidratación y la exposición prolongada al sol pueden aumentar la presión en las venas y contribuir al desarrollo de varices. En contraste, los climas fríos extremos también p

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