
Mantener los faros del coche en perfecto estado no es sólo una cuestión de estética, sino también de seguridad. Sin embargo, con el paso del tiempo, es habitual que aparezca una capa amarillenta en la superficie por la contaminación, el sol, la lluvia y los cambios de temperatura. Estudios han demostrado que esta capa puede reducir la visibilidad hasta en un 40%, razón por la cual cada vez más conductores buscan métodos caseros para limpiar los faros del coche, como este truco con naranja y bicarbonato de sodio que se ha hecho viral en redes sociales como TikTok.
A diferencia de lo que ocurría hace varias décadas, los faros de los vehículos modernos ya no se fabrican con cristal, sino con policarbonato. Este plástico es muy resistente a los impactos, pero extremadamente sensible a los rayos ultravioleta. Por lo tanto, cuando el coche pasa mucho tiempo al sol, el recubrimiento protector de los faros se degrada. A esto hay que sumar las microabrasiones producidas por los lavados frecuentes, la suciedad y la arena. ¿El resultado? Los faros adoptan un aspecto envejecido y, lo que es peor, pierden transparencia.
El truco definitivo para limpiar los faros del coche
Lo curioso de este método es que utiliza dos ingredientes que seguro tienes en casa. Por un lado, la naranja . Gracias a su acidez, ayuda a descomponer la capa superficial de suciedad, actuando como una especie de lija natural que no daña el policarbonato. Por otro lado, el bicarbonato de sodio , un producto ampliamente utilizado en la limpieza del hogar. Cuando se combina con la humedad y la acidez de la naranja, se forma una pasta que arrastra la suciedad y pule la superficie sin rayarla. Toma nota de cuáles son los pasos a seguir para limpiar los faros del coche:
- Antes de aplicar la mezcla, limpia los faros con agua y jabón neutro para retirar polvo y grasa. Sécalos con un paño de microfibra.
- Corta una naranja por la mitad. No hace falta pelarla, porque la propia cáscara te servirá de soporte para frotar.
- Espolvorea una cucharada de bicarbonato sobre la pulpa de la naranja cortada. Notarás que burbujea un poco: es la reacción entre el ácido cítrico y el bicarbonato.
- Con movimientos circulares, frota directamente sobre la superficie del faro. Verás cómo la pulpa se va mezclando con el bicarbonato y se convierte en una pasta blanquecina.
- Espera entre 5 y 10 minutos para que los ácidos hagan efecto en la capa opaca del plástico.
- Retira los restos con agua abundante y seca con un paño limpio.
- Si los faros están muy sucios, puedes repetir el proceso dos o tres veces hasta obtener el resultado deseado.
- Para terminar, aplica cera protectora. Es la mejor forma de evitar que el plástico se oxide rápidamente de nuevo.
Para no manchar la pintura del coche , a la hora de aplicar este truco para limpiar los faros, coloca cinta de carrocero alrededor. Además, es importante hacerlo a la sombra, ya que el calor directo del sol puede secar la mezcla de naranja y bicarbonato de sodio más rápido y, por ende, pierda efectividad. La frecuencia recomendada es de cada dos o tres meses.
Otras soluciones caseras
Además de este método, hay otros remedios para devolver la transparencia a los faros. Uno de los más conocidos es la aplicación de pasta de dientes , ya que contiene microabrasivos que ayudan a arrastrar la suciedad. Al frotar con un cepillo o con un paño, se consigue un pulido suave que elimina parte de la opacidad. Sin embargo, hay que tener en cuenta que este truco requiere bastante esfuerzo,ya que hay que frotar durante varios minutos.
El vinagre y el bicarbonato de sodio también son muy útiles para limpiar los fatos del coche. El vinagre, por ser ácido, ataca la oxidación, y el bicarbonato añade un toque abrasivo. Comparado con la naranja y el bicarbonato, el vinagre resulta menos práctico porque no permanece en la superficie. En cambio, la pulpa de la naranja actúa como base sólida que mantiene el bicarbonato en contacto con el faro durante más tiempo.
Consejos prácticos
Después de limpiar los faros, la superficie queda más expuesta,. Una forma sencilla de compensar esto es aplicar un spray protector contra rayos ultravioleta , que crea una película transparente que actúa como escudo frente al sol y evita que el plástico se oxide tan rápido. La aplicación es muy fácil: basta con pulverizar sobre el faro limpio y seco, y extender con un paño de microfibra.
Siempre que sea posible, evita aparcar al sol. Si no queda más remedio, puedes usar un parasol en el parabrisas . Aunque no cubra directamente los faros, reduce la temperatura general del coche y la radiación sobre la parte frontal.
En definitiva, mantener los faros en buen estado no requiere gastarse una fortuna, sino constancia y pequeños gestos . Los resultados pueden durar mucho más tiempo del que imaginas.