Médicos chinos han extraído del glúteo de una mujer china un trozo de termómetro de vidrio que la mujer llevaba clavado durante más de 20 años tras un accidente escolar.
Tal y como recoge el Mirror, hace 22 años, cuando todavía era una joven alumna de primaria, la paciente, identificada como señora Hu, se sentó accidentalmente sobre un termómetro y requirió atención médica urgente.
"Estaba sentada en mi escritorio cuando un compañero me pidió prestado mi goma de borrar. Se me cayó al suelo y fui a buscarla. Mi compañero también lo buscó debajo del escritorio, pero casualmente tenía un termómetro en la mano, que estaba sobre mi silla. Lo encontré antes que él, así que fui a sentarme. El termómetro se me quedó atascado en la nalga izquierda", explica la mujer.
En aquel momento, los médico