El ministro de Defensa de Colombia, Pedro Sánchez, alertó sobre las consecuencias de que Estados Unidos retire la certificación al país en la lucha contra las drogas. Durante una entrevista con la agencia AFP, Sánchez afirmó que tal decisión beneficiaría a los narcotraficantes y perjudicaría a las naciones.

El Gobierno del presidente Donald Trump debe tomar una decisión antes del 15 de septiembre sobre la continuidad del apoyo económico a las Fuerzas Militares colombianas, que es crucial en la lucha contra los cárteles y las guerrillas financiadas por el tráfico de cocaína. Según el ministro, la pérdida de la certificación significaría un triunfo para las mafias, ya que esta certificación representa un "apoyo importante" para que Colombia pueda actuar con mayor contundencia contra el narcotráfico.

"Ganan los ilegales, pierden las naciones. La certificación es un símbolo de cooperación, de alianza, de confianza, pero también de capacidades", declaró Sánchez.

El ministro realizó un recorrido por el departamento de Putumayo, en la frontera con Ecuador, donde participó en la erradicación de cultivos de coca junto a campesinos. Este esfuerzo se enmarca en un contexto complicado, ya que la renovación de la certificación se produce en medio de un despliegue militar estadounidense en el Caribe y Latinoamérica para combatir el tráfico de drogas hacia Estados Unidos.

Colombia enfrenta su peor crisis de seguridad en una década, con un aumento en los atentados, cifras récord de cultivos ilícitos y el reciente asesinato del senador Miguel Uribe Turbay, quien aspiraba a la presidencia por el partido opositor Centro Democrático.

Además, la situación se complica por la tensión diplomática entre Trump y el presidente colombiano Gustavo Petro, quien ha criticado las políticas del mandatario estadounidense. Petro también cuestionó el despliegue naval de EE.UU. en el Caribe, una acción que ha sido rechazada por el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela.