Hacer queso untable en casa puede sonar complicado, pero la realidad es que con apenas tres ingredientes básicos podés preparar una versión casera, deliciosa y mucho más saludable que la industrial. Esta receta es ideal para quienes disfrutan de desayunos o meriendas frescas, y también para los que buscan tener un dip rápido y versátil a la hora de recibir visitas. Además, lo mejor de todo es que no necesitás experiencia en la cocina: cualquiera puede hacerlo.

El secreto está en transformar la leche en una ricota y luego darle una textura más cremosa. Con un poco de paciencia y siguiendo el paso a paso, vas a obtener un queso perfecto para acompañar tostadas, galletas saladas o incluso usar como base para preparaciones más elaboradas. Una vez que lo pruebes, no vas a querer volver al su

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