Un sismo de magnitud 4.7 se registró en Perú el 7 de septiembre. El movimiento telúrico ocurrió a las 00:08 hora local, en la ciudad de Lomas, provincia de Caraveli, en el departamento de Arequipa. Según el Centro Sismológico Nacional (CENSIS) del Instituto Geofísico del Perú (IGP), el epicentro se localizó a 82 kilómetros al suroeste de Lomas, a una profundidad de 28 kilómetros.

La intensidad del sismo fue clasificada como III, lo que indica un movimiento débil que no representa daños significativos. El IGP emitió un rango de alerta amarillo, que se asigna a sismos con magnitudes entre 4.5 y 6.0. Para poner en contexto, el rango verde se utiliza para sismos menores a 4.4, mientras que el rojo se aplica a terremotos mayores a 6.1.

Perú se encuentra en el Cinturón de Fuego del Pacífico, una región conocida por su alta actividad sísmica debido a la interacción de placas tectónicas. Esta zona alberga aproximadamente el 75% de los volcanes del mundo y es responsable del 80% de los movimientos telúricos más fuertes. El IGP utiliza redes sociales y otros canales para informar sobre los sismos, proporcionando detalles como el epicentro, la magnitud y la hora del evento.

Históricamente, Perú ha enfrentado sismos devastadores. Uno de los más destructivos fue el terremoto de Áncash en 1970, que dejó alrededor de 67,000 muertos. Otros eventos significativos incluyen el sismo de Lima en 1974, que causó 252 muertes, y el terremoto de Pisco en 2007, que dejó 596 fallecidos.

La Red Sísmica Nacional, que forma parte del CENSIS, está compuesta por sensores distribuidos en todo el país, lo que permite un monitoreo constante de la actividad sísmica. La población es instada a estar atenta a las alertas y a seguir las recomendaciones de las autoridades en caso de sismos.