El 7 de septiembre, el Vaticano vivió un momento histórico con la canonización de Carlo Acutis, el primer santo católico de la generación milenial. La ceremonia, presidida por el Papa León XIV en la Plaza de San Pedro, reunió a aproximadamente 70,000 jóvenes de todo el mundo. Acutis, quien falleció a los 15 años en 2006 debido a leucemia, es conocido por su devoción a la Eucaristía y su labor en el ámbito digital.

Junto a él, también fue canonizado Pier Giorgio Frassati, un joven italiano que dedicó su vida a ayudar a los necesitados y que murió en 1920. Durante la ceremonia, el Papa León XIV destacó la importancia de ambos santos como ejemplos de vida y servicio. "Todos ustedes, todos nosotros juntos, estamos llamados a ser santos", afirmó el pontífice.

León XIV subrayó que Carlo Acutis decía que "el cielo siempre nos ha estado esperando" y que "amar el mañana es dar lo mejor de nosotros mismos hoy". La vida de Acutis, nacido en Londres en 1991 y criado en Milán, estuvo marcada por su interés en la informática, lo que le permitió crear páginas web para difundir enseñanzas religiosas. Por esta razón, ha sido reconocido como el "Santo patrón del Internet".

Su cuerpo, conservado en la Iglesia de la Spogliazione en Asís, Italia, se ha convertido en un lugar de veneración. Los fieles pueden ver un molde de cera que lo representa vestido con ropa cotidiana, como chándal y zapatillas deportivas, lo que refleja su conexión con la juventud actual.

La canonización de Acutis fue precedida por el reconocimiento de dos milagros atribuidos a su intercesión. El primero ocurrió en Brasil en 2013, cuando un niño con una malformación congénita del páncreas se recuperó de manera inexplicable. El segundo milagro tuvo lugar en 2022 en Costa Rica, donde una joven que sufrió un traumatismo craneoencefálico grave recuperó funciones vitales tras las oraciones de su madre ante la tumba de Acutis.

La ceremonia de canonización, que había sido pospuesta debido a la salud del Papa Francisco, se convierte en un momento significativo para la Iglesia y la juventud católica en todo el mundo.