En agosto no ha faltado quien nos envíe imágenes de salidas o puestas de sol. Madruga en la montaña o se acuesta en la playa para participarnos sus emociones ante el paisaje. Todo turista reporta su éxtasis en tal o cual desierto, piélago griego, palmeral caribeño o fiesta de pueblo.
Éxtasis , del griego ekstasis , es estar fuera de sí por un estado personal de plenitud. No es delirio, alucinación, ni necesariamente unión mística. Hay el éxtasis ante un cuadro de Rothko, el de la madre con el bebé dormido en sus brazos o el de quien se estremece en Bayreuth escuchando a Wagner. Este pasado agosto yo presencié dos sujetos en estado de éxtasis.
Este pasado agosto yo presencié dos sujetos en estado de éxtasis
Uno fue en Saint-Denis, cerca de París. Costó aparcar. Llovía cuando nos di