Su labor como organizador de la comunidad hispana en Long Island es de larga data, desde principios de la década pasada. Ha estado en todas las luchas y es incansable en sus objetivos. Ahora, mientras la mayoría aún despierta, Osman Canales ya recorre las calles con su megáfono, persiguiendo a los agentes de ICE que realizan los arrestos matutinos.
Redacción LTH
«¡Vergüenza por arrestar trabajadores!», grita a través de su megáfono. «¡Separando familias… se están llevando a trabajadores inocentes!», agrega. Sus oyentes, los agentes de ICE.
Canales, de 36 años, un inmigrante salvadoreño naturalizado estadounidense, se ha convertido en una figura legendaria en la comunidad inmigrante de Long Island. Su rutina diaria consiste en rastrear a los agentes federales desde Riverhead, al extremo