El hijo de Anjolene Smack-Whaley puede tener dificultades para controlar su ira y sus emociones, lo cual es comprensible ya que el joven de 24 años está dentro del espectro autista.

Pero no por ello es menos difícil para ella tener que afrontarlo.

“Hacía muecas. Hablaba muy alto”, dijo. “También amenazaba: ‘Voy a hacer esto. Voy a hacer aquello’. Salía corriendo… corriendo por la calle”.

También trabaja, lo que significa tratar con personas que pueden tener personalidades diferentes, lo que a veces no siempre ayuda en las situaciones.

«Cuando tenía problemas, especialmente al tratar con la gente, especialmente con el trabajo, me estresaba», dijo Smack-Whaley, quien vive en Bowie.

Pero hace aproximadamente un año, comenzó a recibir tratamiento de salud mental para su hijo como parte de

See Full Page