En la película Interestelar , la humanidad lucha contra un planeta agonizante por el cambio climático, buscando desesperadamente un planeta más allá de nuestra galaxia que garantice el futuro de la raza humana, con fuentes de energía alternativas para sobrevivir. Esta visión distópica no está tan lejos de nuestra realidad: el calentamiento global amenaza con sequías, tormentas intensas y escasez de recursos.
La energía solar, que convierte la luz del sol en electricidad mediante paneles fotovoltaicos, surge como una héroe en esta historia, ofreciendo una opción limpia y abundante. Sin embargo, mitos persistentes la pintan como ineficiente o problemática , desanimando su uso masivo. Estos malentendidos no son inofensivos; retrasan la transición a energías renovables , perpetuand