Israel llevó a cabo un ataque aéreo en Doha, Qatar, dirigido a altos mandos de Hamas, lo que ha marcado un nuevo capítulo en el conflicto de Medio Oriente. Este ataque se produjo pocas horas después de que Israel aceptara la propuesta del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para un alto el fuego en Gaza, lo que ha generado una gran controversia y ha puesto en jaque las negociaciones de paz.

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, asumió la "responsabilidad total" por la operación, que fue descrita como un intento de eliminar a líderes clave de Hamas. Según fuentes de Hamas, el ataque tuvo como objetivo a una delegación que se encontraba en Doha discutiendo la propuesta de alto el fuego. "La acción de hoy contra los principales cabecillas terroristas de Hamas fue una operación israelí totalmente independiente", afirmó la oficina de Netanyahu.

El ataque ha sido condenado enérgicamente por Qatar, que lo calificó de "cobarde" y una "flagrante violación" de las leyes internacionales. El portavoz del Ministerio de Exteriores catarí, Majed al Ansari, indicó que se ha iniciado una investigación al más alto nivel y que se están tomando medidas para garantizar la seguridad de los residentes. "Este ataque criminal representa una grave amenaza para la seguridad de los cataríes y sus residentes", añadió.

Testigos en Doha reportaron explosiones y columnas de humo, aunque hasta el momento no se han registrado víctimas. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) aseguraron que se tomaron medidas para mitigar el daño a la población civil, utilizando munición de precisión. Sin embargo, la respuesta de Hamas fue inmediata, afirmando que todos los miembros presentes en la reunión sobrevivieron al ataque.

Este ataque se produce en un contexto de creciente tensión en la región, donde Qatar ha actuado como mediador en las negociaciones entre Israel y Hamas. La decisión de Israel de atacar en Doha, un aliado clave de Estados Unidos, ha generado preocupaciones sobre el futuro de las negociaciones de paz y la posibilidad de un cese al fuego en Gaza.

Analistas advierten que este ataque podría complicar aún más la situación, ya que Israel parece estar dispuesto a llevar su ofensiva a cualquier rincón de Medio Oriente. La comunidad internacional observa con atención cómo se desarrollarán los acontecimientos tras este ataque, que podría tener repercusiones significativas en la seguridad regional.