Javier Picazo Feliú
Madrid, 9 sep (EFE).- Desde que en 1999 saliera el primer videojuego de baloncesto de 2K, la saga ha ido avanzando paso a paso hasta convertirse en el simulador por excelencia en un género en el que no tienen competencia. Este año NBA 2K26 da un paso adelante y pule al máximo sus gráficos, jugabilidad y modos de juego para lograr, sin sorprender, un título que es baloncesto en estado puro.
Cambiar de forma radical algo que ya funciona no parece una gran idea, y bajo esta premisa este nuevo NBA 2K26 no pretende modificar su estructura sino mejorar cientos de detalles que lo convierten en un título mejorado, más rápido y fluido.
Para ello, introducen mejoras que logran renovar los movimientos de los jugadores durante el juego, las mecánicas de defensa, la interacción y