Nueva York, 9 sep (EFE).- El presidente de EE.UU., Donald Trump, lleva más de un mes amenazando a la ciudad de Chicago (Illinois) con una operación a gran escala para deportar a inmigrantes que cuentan con supuestos expedientes delictivos a sus espaldas, pero, más allá de las advertencias, esas redadas masivas aún no se han producido.
“Chicago está a punto de descubrir por qué se llama Departamento de Guerra”, escribió Trump en Truth Social el sábado, aunque luego se retractó, dejando entrever que, como ocurrió en Los Ángeles y en Washington D.C., ordenaría incluso a efectivos de la Guardia Nacional desplegarse en esta ciudad, como las anteriores, un bastión del Partido Demócrata.
Bautizada como ‘Operación Midway Blitz’, y presuntamente ya en marcha en diferentes puntos de Chicago y de I