Las pedidas de mano en Hollywood nunca llegan en cajas humildes o modestas. Y es que la clásica pregunta de “¿quieres casarte conmigo?” lleva también, para las grandes figuras, el compromiso de dar anillos que brillen más que los flashes de las alfombras rojas más exitosas.

Así, generalmente las piezas vienen de casas de lujo con gran renombre como Tiffany, Cartier, Harry Winston o Chopard, los cuales son famosos por su historia, la belleza de sus piezas, el trabajo artesanal y además el origen sostenible de sus piedras preciosas.

Aunque Travis Kelce, diseñó con una firma no tan reconocida, Artifex Fine, el ya famoso anillo que le entregó a Taylor Swift con un valor que podría llegar a los 2 millones de dólares, esta pieza no llega a entrar al top de estas joyas que en el Siglo 21 han en

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