El agua subió más de 50 centímetros en el fraccionamiento Vizcaya, y se repitió la pesadilla de cada vez que llueve: agua estancada, viviendas inundadas, muebles echados a perder, malos olores y fauna nociva
El agua subió más de 50 centímetros en el fraccionamiento Vizcaya, y se repitió la pesadilla de cada vez que llueve: agua estancada, viviendas inundadas, muebles echados a perder, malos olores y fauna nociva.
Habitantes del fraccionamiento Vizcaya, principalmente de las calles Markina y Murguía, expusieron su hartazgo por un problema que parece no tener fin: las inundaciones y estancamiento de agua cada vez que llueve. Explicaron que estas dos vialidades se encuentran en una zona baja que además es afectada por una falla geológica, lo que ha provocado que la problemática sea cada vez