Londres. El Mundial 2026 podría ser el último de Norteamérica sin una adaptación urgente al clima, según un nuevo estudio que pone de relieve las amenazas meteorológicas extremas.
El informe Canchas en peligro, elaborado por las ONG Football for Future y Common Goal, revela que 10 de las 16 sedes mundialistas corren un riesgo muy alto de sufrir condiciones extremas de estrés térmico.
Además, 14 de los 16 estadios en Estados Unidos, Canadá y México –en el caso del BBVA– superaron en 2025 los umbrales de seguridad en al menos tres de los principales riesgos climáticos: calor extremo, lluvias torrenciales e inundaciones.
Trece ya experimentan al menos un día cada verano en el que se supera el umbral de la FIFA para realizar las pausas de hidratación, de 32 grados centígrados de temperatur