El abejaruco europeo, conocido científicamente como Merops apiaster, es un ave que no pasa desapercibida gracias a su plumaje multicolor. Con el pecho azul, el vientre verdoso, la cabeza canela, el cuello amarillo y una lista negra que resalta sobre el ojo, este ejemplar se convierte en uno de los más vistosos de Eurasia y África. Su pico largo, fino y ligeramente curvado delata su naturaleza insectívora y es una herramienta esencial para su modo de vida.
Esta especie desarrolló estrategias sorprendentes para prosperar en diversos hábitats. Vive en zonas abiertas como cultivos y pastizales con vegetación dispersa, y suele aprovechar cortes en el terreno, como los que se forman cerca de carreteras o vías férreas, para anidar. Sociable y gregaria, esta ave rara vez se posa en el suelo