Los hogares de alcaldías centrales como o Miguel Hidalgo reciben hasta 168 horas de a la semana (24 al día), mientras en zonas periféricas como Milpa Alta o Iztapalapa el suministro puede variar entre 16 horas y cero a la semana. La brecha es tan amplia que obliga a miles de familias a depender de pipas o tinacos para sobrevivir.

El dato proviene de la Evaluación integral de la política de agua potable de la Ciudad de México , cuyos resultados fueron presentados en El Colegio de México .

El documento, elaborado por la Comisión de Evaluación de la Política Social de la CDMX revela que, aunque el 98% de la población capitalina tiene acceso formal al servicio de agua entubada, la regularidad con la que llega es tan dispar que convierte a la capital en una ciudad partida en

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