Durante más de cinco horas, una adolescente de 14 años mantuvo en vilo a la comunidad educativa del colegio Marcelino Blanco, en La Paz, Mendoza, al atrincherarse armada con la pistola calibre 9 milímetros de su padre, un policía de San Luis. La joven efectuó tres disparos al aire antes de entregarse a las autoridades, que la mantienen bajo atención médica especializada en salud mental.
Mercedes Rus, ministra de Seguridad de Mendoza, explicó en conferencia de prensa que la menor está en buen estado físico, pero que el foco del tratamiento será psicológico para comprender las causas que llevaron a esta situación extrema. Al ser inimputable por su edad, el caso está bajo la órbita del Ejecutivo provincial a través del ETI (Equipos Técnicos Interdisciplinarios), que protegen los derechos de