
Trabajar muchas horas frente al ordenador tiene un precio, y suele pagarse caro: dolores en la espalda, cervicales contracturadas y esa sensación de rigidez que puede durar incluso horas, más allá del tiempo frente a la pantalla. Muchas veces se culpa al estrés o al ritmo laboral, pero lo cierto es que una silla incómoda puede ser la principal culpable. Porque no basta con que tenga ruedas o respaldo alto, lo que realmente marca la diferencia es la ergonomía real y los materiales que acompañan. Y ahí es donde Sklum ha dado en el clavo.
Entre las novedades de la colección de otoño de Sklum, nos encontramos con una silla de oficina que está llamando la atención por razones más que justificadas. Se trata de la silla Teill, que además de tener un diseño moderno y limpio, está pensada para ofrecer un apoyo lumbar efectivo, mantener una postura cómoda durante horas y, de paso, darle un toque elegante al espacio de trabajo. Disponible en colores suaves como mousse celadón, violeta, beige o verde, esta silla no sólo encaja en oficinas minimalistas o despachos con estilo nórdico, también conquista por su precio ajustado y por lo ligera que resulta. ¿El secreto? Una combinación de polipropileno, nylon y acero que da como resultado una estructura resistente, flexible y, sobre todo, cómoda. Pero conozcamos más sobre los detalles de esta silla y qué la hace tan especial.
La mejor de las sillas de oficina, rebajada en Sklum
Si alguna vez has terminado el día con la sensación de que tu espalda te pide vacaciones, probablemente no estabas sentado en una silla como esta. La silla de oficina Teill de Sklum incorpora un sistema de refuerzo lumbar que permite mantener una postura natural sin forzar la curvatura de la columna. Esto se traduce en menos presión en la zona baja de la espalda y una mejora notable si pasas más de cuatro horas seguidas en tu escritorio. Además, cuenta con un reposacabezas elevado que da soporte a las cervicales, algo que se agradece especialmente si trabajas mirando pantallas durante mucho tiempo.
Por otro lado, tiene una curvatura del respaldo que no es casual : está diseñada para adaptarse al contorno de la espalda y favorecer una posición más ergonómica desde el primer momento. Podrás sentirte más cómodo y mejor sentado durante horas y a la larga, evitar problemas de espalda o de lumbares, o que en definitiva, no se recarguen tanto.
Altura regulable, ruedas resistentes y libertad de movimiento
Otro punto a favor es la regulación de altura, que permite ajustar la silla a distintos tipos de mesa y usuarios. Desde personas más bajas hasta quienes miden más de 1,80, cualquiera puede encontrar su altura ideal con un gesto rápido. En concreto, el asiento se puede ajustar desde los 45 hasta los 52 centímetros, y viene acolchado con una espuma firme pero cómoda, pensada para aguantar bien el paso de las horas sin que notes que se hunde ni que se vuelve incómoda. Es ese tipo de acolchado que da soporte sin volverse rígido, justo en el equilibrio que muchas sillas no logran encontrar.
Las ruedas , por su parte, se deslizan con suavidad, sin ese ruido molesto que algunas empiezan a hacer con el uso. Puedes así moverte por el espacio de trabajo sin tener que levantarte cada vez que necesitas algo. Y según los datos del fabricante, soporta hasta 110 kilos sin problema.
Ligera, resistente y sin complicaciones para limpiar
Aunque su diseño es ligero y visualmente limpio, no hay que dejarse engañar: está fabricada con materiales sólidos. El respaldo y el asiento combinan nylon con polipropileno, lo que la hace flexible pero robusta. Las patas, hechas de acero, aportan la estabilidad justa sin convertirla en un trasto pesado. Pesa poco más de 10 kilos, así que puedes moverla de un sitio a otro sin esfuerzo.
Y si te preocupa el mantenimiento, basta pasar un paño húmedo de vez en cuando y listo . No hace falta ningún producto especial, ni desmontarla para limpiarla.
Elegancia sin complicaciones para cualquier rincón del hogar
Lo interesante de la silla Teill de Sklum es que no necesita estar en una oficina enorme para lucir bien. Su diseño sobrio, con líneas suaves y colores neutros, permite que encaje igual de bien en un despacho doméstico, un dormitorio reconvertido o una zona de estudio compartida.
Además, está disponible en varios tonos que se adaptan fácilmente a cualquier estilo decorativo, desde el más moderno hasta el más clásico. El color mousse celadón, por ejemplo, aporta frescura y calma al ambiente. El violeta le da un toque distintivo sin resultar estridente. Y si lo que se busca es discreción, el beige combinado con verde claro es una apuesta segura. En todos los casos , el precio se mantiene igual: 99,95 euros, rebajada actualmente desde los 109,95 euros.
Así que ahora ya lo sabes, si buscas una silla de oficina que combine diseño, funcionalidad y un precio razonable, esta propuesta de Sklum cumple con creces. No sólo por sus características técnicas, que están bien pensadas y ejecutadas, sino porque aporta algo que muchas otras sillas del mismo rango no ofrecen: comodidad real desde el primer uso. En un momento en el que el teletrabajo parece estar en auge , invertir en una buena silla ya no es un capricho, es una necesidad. Y si encima puedes hacerlo con estilo, mejor que mejor. ¿No te parece?.