Ciudad de México.- Explorar un nuevo mercado en la categoría de smartphones es complejo. Las empresas se enfrentan a posibles rechazos por parte de los usuarios, quienes suelen ser fieles a sus marcas. Sin embargo, Google emprendió este desafío con la llegada de Pixel a México con dos conceptos en mente: confianza e interés por aprender de los consumidores nacionales.
“Google es una empresa dirigida por los datos”, menciona Shakil Barkat, vicepresidente de Dispositivos y Servicios en Google. “Recolectamos la data de los usuarios y los usamos de vuelta para las funciones que construimos”, explica en torno a su decisión de, finalmente, arribar al mercado mexicano.
En este sentido, el país puede ser considerado un laboratorio de pruebas a través de Pixel, pues se trata del dispositivo