Una fuerte explosión sacudió el edificio de Sociología de la Universidad Nacional de Bogotá la tarde del jueves 11 de septiembre, dejando al menos una persona gravemente herida. La situación se desató en medio de disturbios provocados por encapuchados que habían tomado varias áreas del campus. Según las autoridades, la explosión se produjo mientras se manipulaban artefactos explosivos improvisados, lo que llevó a la evacuación inmediata de estudiantes, docentes y personal administrativo.

La Policía Metropolitana de Bogotá confirmó que la herida, una mujer, fue trasladada a la clínica Palermo con severas lesiones en una mano, incluyendo la posible pérdida de varios dedos. Ronald Vargas, exrepresentante estudiantil, afirmó: "Se les estalló la cocina con un montón de explosivos. Al parecer hay una compañera herida". La situación obligó a la Vicerrectoría de la sede Bogotá a emitir una orden de desalojo a partir de las 6:00 p.m., citando razones de seguridad para la comunidad universitaria.

El Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) fue desplegado para intentar controlar la situación. La Alcaldía de Bogotá activó la alerta roja en todos los correos institucionales, instando a la comunidad a evacuar el campus. Además, los disturbios se extendieron a las calles aledañas, donde encapuchados causaron daños en la infraestructura de TransMilenio, afectando el transporte público en la zona.

Las autoridades están investigando los hechos y analizando inscripciones encontradas en la escena de la explosión. Un portavoz de la Alcaldía declaró: "Estamos frente a un hecho que atenta contra la seguridad ciudadana y la convivencia. No vamos a permitir que este tipo de actos pongan en riesgo la vida de la comunidad educativa ni de los bogotanos". La Universidad Nacional condenó los actos de violencia y anunció la suspensión de actividades presenciales hasta que se garantice la seguridad de su comunidad académica.