Han pasado 24 años desde aquella mañana del 11 de septiembre que cambió el mundo para siempre. Dos jóvenes bomberos puertorriqueños, con apenas 20 y 22 años, respondieron al llamado de auxilio en la ciudad de Nueva York.
Eran el teniente Joel Figueroa Betancourt y el capitán Néstor Alonso Cuevas... héroes que pisaron la zona cero cuando aún ardían las cenizas de las torres gemelas.
El impacto de los aviones, el humo que cubrió el cielo y las imágenes que recorrieron el planeta... ellos las vieron no solo en televisión, sino de frente, al llegar a una ciudad paralizada por la tragedia.
Cuando Joel Figueroa y Néstor Alonso llegaron a la zona cero, lo que encontraron fue un escenario de guerra: escombros, estructuras retorcidas, polvo que cubría cada rincón... y un silencio interrumpido so