Este viernes, el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, hizo su reaparición tras un viaje a Washington, Estados Unidos. Durante su estancia, se reunió con políticos de ambos partidos, demócratas y republicanos, así como con el subsecretario de Estado. A su regreso, Gutiérrez anunció la llegada de 350 soldados de fuerzas de despliegue rápido y 130 policías de grupos especiales de combate urbano. Su objetivo es "neutralizar la amenaza y, si es necesario, neutralizar a los terroristas".

El alcalde destacó que se han activado todas las burbujas de inteligencia para contrarrestar la amenaza terrorista, y que ya han comenzado los allanamientos. En este contexto, informó sobre la detención de un individuo conocido como "El tío" o "El Sastre", quien supuestamente confeccionaba uniformes y banderas del frente 36 de las disidencias. Gutiérrez explicó que en la vivienda del detenido se encontraron banderas y logos de las FARC, así como radios que se utilizan para detonar cargas explosivas.

"Los radios no los utilizan para comunicarse, los utilizan para detonar las cargas explosivas, como los que usaron para volar la torre de Empresas Públicas de Medellín en el sector de Loreto", afirmó Gutiérrez. Además, el alcalde se comprometió a perseguir a los responsables de estos actos, calificándolos de "cobardes".

En cuanto a la militarización de la ciudad, Gutiérrez aseguró que tanto el Ejército como la Policía estarán presentes las 24 horas en puestos de control en Medellín, así como en las entradas y salidas de la ciudad. "Están es para estar en las calles, no para estar acantonados. La gente tiene que sentirse segura y vamos a seguir luchando contra esta amenaza terrorista", subrayó.

Durante la rueda de prensa, Gutiérrez también proporcionó detalles sobre el atentado a la torre de energía. Informó que los atacantes no solo instalaron cargas explosivas para derribar la torre, sino que también dejaron explosivos en el camino, creando un "campo minado" para las fuerzas de seguridad. Gracias a la labor de la Policía y el Ejército, se desactivaron las cargas sin afectar a los policías, soldados ni a la población civil.

El alcalde anunció recompensas de 200 millones de pesos para quien proporcione información que lleve a la captura de los criminales responsables de los artefactos explosivos. También ofreció 50 millones de pesos para información que prevenga un ataque terrorista y 100 millones de pesos para quien brinde datos sobre alias "Primo gay", del frente 36.