Erika Kirk, la viuda de Charlie Kirk, el influencer trumpista asesinado el miércoles durante un acto al aire libre en la Universidad del Valle de Utah, habló anoche por primera vez después del tiroteo. En un discurso de veinte minutos emitido en las redes sociales de la asociación que dirigió su esposo, Turning Point USA, Kirk dijo entre lágrimas que su voz “permanecerá” y se hará más poderosa tras su muerte.
“Hace dos días mi esposo fue a ver el rostro de su salvador. Quería ser recordado por su coraje. Ahora está llevando la gloriosa corona del mártir”, afirmó, desde un atril situado en la antigua oficina de Kirk, con una gorra en la mesa con el número 47, en referencia al segundo mandato de Donald Trump. El republicano también usó la palabra “mártir” para referirse a su aliado, muerto