Mañanera… Uuupss. Un bache se la atraganta al coche y sale a flote.
“¿Qué pasó, Abelardo?”, le pregunto al chofer que me auxilia cuando voy para la llamada megalópolis.
“Es un hoyo muy grande”, fue su contestación.
“¿En Insurgentes?”.
“Pues sí; toda la ciudad está llena de estos socavones que se abren con la lluvia”.
Es increíble tanta indolencia; la ciudad se desbarata en muchas de sus zonas más pobladas. Quién iba a pensar que en arterias tan importantes se diera este fenómeno. La jefa de Gobierno, sin interés, le da vuelta a la compostura de calles a pesar de que es un ingreso para los bolsillos de la camarilla que gobierna. Yo creo que quieren esperarse a que se junte un millón de baches para comenzar a tapar los hoyos y que sea un negocio más redituable que tapar uno en Insur