Han pasado ya varias décadas desde que empecé a disfrutar de los primeros juegos que intentaban emular la esencia de los rallies de coches. El más mítico y que me marcó de manera intensa fue Colin McRae Rally lanzado en 1998 para PlayStation y PC y que se convirtió en uno de los juegos de rallies más completos y exigentes, al simular con realismo este deporte, siendo estas las señas de identidad del resto de entregas de la saga. Ahora, en pleno siglo XXI, tras años de iteraciones de títulos que apuestan por el realismo en las físicas, los gráficos y las sensaciones, he vuelto a recobrar la esperanza. Y se llama Rally Arcade Classics. Un título que llega como un homenaje a la edad dorada de los juegos de carreras, pero con una mirada fresca y contemporánea y que ha sido desarrollado p

See Full Page