El Gobierno ha bendecido las protestas propalestinas en la Vuelta Ciclista a España, que este domingo obligaron a suspender la última etapa y la ceremonia del podio en Madrid. A pesar de los altercados violentos que se produjeron y los más de 20 agentes de policía heridos, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha destacado este lunes la "imagen" de "compromiso con la paz" que dieron los manifestantes y ha tildado de "pacíficas" las protestas.
Incluso el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, llegó a expresar este domingo su "admiración" por esas protestas, un mensaje que muchos han interpretado como un estímulo para los manifestantes.
Pero la postura del Gobierno no ha sido siempre tan complaciente con los manifestantes, sino que se ha ido acercando a ellos con el paso de