
Cuando alguien recibe un diagnóstico de infección de transmisión sexual (ITS), la parte más difícil no siempre es el tratamiento. Para muchas personas, lo más complicado es dar la cara ante sus parejas sexuales y comunicarles que han podido estar expuestas. El miedo al rechazo, la vergüenza o el hecho de que se tratara de un encuentro casual suelen llevar al silencio. En ese vacío aparece Con-Tacto , la primera aplicación española diseñada para avisar de manera anónima y segura a quienes han mantenido relaciones sexuales con una persona diagnosticada.
El proyecto está impulsado por médicos del Hospital Universitario Parc Taulí de Sabadell, con la doctora María del Carmen Navarro a la cabeza. En una primera fase, la app se dirigirá a usuarios de la PrEP, la profilaxis preexposición al VIH. Este colectivo mantiene revisiones periódicas en los servicios de salud, lo que permite detectar antes las infecciones y hacer un pilotaje controlado de la herramienta. La idea es sencilla: si alguien da positivo en gonorrea, sífilis o clamidia, podrá enviar un aviso totalmente anónimo a sus contactos sexuales recientes para que se hagan la prueba lo antes posible.
La aplicación no sólo enviará alertas, también incorporará un chatbot con inteligencia artificial que resolverá dudas, orientará en los pasos a seguir y facilitará enlaces a recursos sanitarios fiables. Aunque todavía está en desarrollo, el proyecto ha recibido un fuerte impulso tras ganar el premio de salud en el evento Break The Gap 2025, con una financiación de unos 50.000 euros para acelerar su lanzamiento en iOS y Android.
La necesidad de una herramienta como esta es evidente. Según datos oficiales, las ITS llevan años creciendo en España. En 2023 se registraron más de 34.000 casos de gonorrea, casi 37.000 de clamidia y más de 10.000 de sífilis. El aumento es sostenido: la gonorrea subió más de un 40 % entre 2021 y 2023, la sífilis un 24 % y la clamidia un 20 % anual desde 2016. La mayoría de los diagnósticos se concentran en hombres jóvenes de entre 20 y 34 años, aunque la clamidia preocupa especialmente porque suele ser asintomática y se transmite sin que el portador lo sepa.
La ventaja de Con-Tacto es que puede romper esa cadena silenciosa. Avisar a tiempo significa que la otra persona puede hacerse pruebas, recibir tratamiento y cortar de raíz una posible transmisión secundaria. Además, al ser anónimo, se reduce la barrera psicológica de tener que dar explicaciones directas, lo que podría animar a más personas a notificar. En paralelo, la app busca rebajar el estigma que aún acompaña a las ITS y que suele ser uno de los principales frenos a la comunicación.
Beneficios del proyecto
Sin embargo, no todo son beneficios asegurados. El proyecto también enfrenta retos importantes. La privacidad de los datos es uno de los pilares más delicados: será necesario garantizar que los avisos no permitan rastrear quién los envió. También existe el riesgo de que se utilice de manera indebida, enviando notificaciones falsas que generen alarma. Además, su éxito dependerá en gran medida de la adopción: cuantos más usuarios participen, más eficaz será la red de avisos.
Aun así, la propuesta del Parc Taulí supone un cambio de paradigma en la forma de afrontar las ITS. Si consigue implantarse con garantías y aceptación social, no solo reducirá contagios, también fomentará una cultura de mayor responsabilidad compartida en la salud sexual. España, que en las últimas dos décadas ha visto cómo las infecciones bacterianas se disparaban , podría estar dando el primer paso hacia una estrategia digital que luego inspire a otros países.
En definitiva, Con-Tacto es más que una aplicación: es un intento de transformar la forma en la que entendemos la comunicación en salud sexual, eliminando barreras y dotando a los ciudadanos de una herramienta para protegerse mutuamente. La tecnología, bien usada, puede convertirse en un aliado clave para frenar un problema que hasta ahora parecía imparable.