Bad Bunny puede llenar el Yankee Stadium dos veces en un verano. Puede lograr que Saturday Night Live mueva cielo y tierra para sus monólogos. Incluso puede hacer que Adam Sandler vuelva a tomar un palo de golf para Happy Gilmore 2. Pero también tiene conciencia social.
Migrant Insider
Este otoño, el artista más popular del mundo no dará ni un solo concierto en Estados Unidos. No es por falta de dinero. Tampoco porque los fanáticos no griten su nombre como campanas de iglesia. La razón por la cual no vendrá es por los hombres enmascarados de ICE.
El miedo como protagonista
«Me preocupaba que ICE pudiera estar afuera de mi concierto», declaró Bad Bunny a la revista i-D, con la misma naturalidad con la que hablaría del clima.
La imagen desgarradora que quiere evitar es: 20,000 jóvenes e