Un ascensor que no está conectado a nada, una casa flotando como si hubiera sido extraída de cuajo , una escalera en el medio de la nada que llega al marco de una ventana, un vestigio de lo que fue un hogar. Algo de eso de "vestigio" es lo que hay en todo el recorrido de la exposición "La estrategia de la ilusión" de Leandro Erlich . Esa memoria de las cosas atravesadas por cierta tragedia, sobre todo del hogar, de lo cotidiano. ¿Qué quedó de él? ¿Qué pasa si el mundo que conocemos, el privado y el colectivo, se está derrumbando?
La obra de Elrich se permea de preguntas que se instalan sobre obras arquitectónicas que justamente juegan con la realidad y la ilusión. En esta ocasión esta muestra que propone el Banco Macro fue curada por Andrés Duprat que señala al respecto: “La