Lo que siguió fue una demostración de fuerza que dejó claro por qué Milwaukee es el equipo con el mejor récord de las Grandes Ligas (93-59) .
Brandon Woodruff fue el arquitecto de la noche. Con solo diez días de descanso tras una cirugía en el hombro derecho que lo mantuvo fuera la temporada pasada, el lanzador dominó desde el montículo: "Sentí que tenía control de todos mis lanzamientos. Sabía que debía ser eficiente" , comentó después del partido. Sus números lo respaldan: 5 entradas, 2 hits, 1 carrera y 9 ponches , con un impresionante 75% de lanzamientos en zona de strike.
Mientras Woodruff contuvo a los Angelinos , la ofensiva de los Cerveceros explotó en la cuarta entrada. Sal Frelick conectó un jonrón de tres carreras que cambió el ritmo del juego, y Blake Perkins