El presidente ecuatoriano la promueve en un contexto de tensión con los movimientos indígenas y bajo un nuevo estado de excepción
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa , ha dado un paso más en su confrontación abierta con la Corte Constitucional al convocar una consulta popular para instalar una Asamblea Constituyente sin someter previamente la iniciativa al control del máximo tribunal, como exige la legislación ecuatoriana. Lo hace sin el dictamen que debe garantizar la constitucionalidad de la pregunta planteada y de los argumentos que la sustentan. Un paso que abre un nuevo frente de tensión con la Corte, que ya había bloqueado cinco de las ocho preguntas de una anterior propuesta de consulta popular presentada por el Ejecutivo.
El mandatario, que asumió el poder hace casi dos años