Un video inédito, revelado 6 años después, muestra cómo dos ayudantes del alguacil de Luisiana golpearon a un joven de 25 años dentro del Centro de Detención de la Parroquia de DeSoto. Las imágenes han salido a la luz gracias a la demanda presentada por la víctima, que busca una indemnización por lo ocurrido, informa  ABC11.  

En el brutal video se observa cómo los agentes reducen violentamente en la lavandería a un recluso, identificado como Jarius Brown, propinándole cerca de 50 puñetazos , dejándolo con la nariz rota y la cuenca del ojo fracturada. Tras la agresión, ocurrida en el 2019, uno de los oficiales renunció y el otro fue suspendido, y la propia oficina del alguacil admitió que "no había forma de defender" sus acciones.

ADVERTENCIA: LAS SIGUIENTES IMÁGENES PUEDEN HERIR SU SENSIBILIDAD

A pesar de ello, la Policía Estatal de Luisiana, tras meses de demora y más de un año sin entrevistar a Brown, terminó absolviendo a los agentes , asegurando que él había sido el "agresor" en un supuesto altercado tras su arresto por robo de auto. El caso habría quedado archivado si no fuera por la intervención de fiscales federales, quienes concluyeron lo contrario: Brown fue víctima de fuerza excesiva.

Un sistema colapsado

Gary Evans, exfiscal de distrito de la parroquia de DeSoto, afirmó que este caso refleja el rol crucial que por años jugó el Departamento de Justicia en comunidades pequeñas y advirtió sobre el peligro de su debilitamiento bajo la administración Trump, que buscaba "liberar" a la policía. Según Evans,  "este fue un grave error judicial a nivel estatal , y demuestra que el sistema está colapsado y no protege a los ciudadanos".

Además, la paliza a Brown no fue un hecho aislado. Un mes antes, otro agente de la misma localidad fue acusado de prevaricación por golpear repetidamente a un hombre en un supermercado, y en otro caso, un oficial fue acusado de violación en tercer grado tras forzar a una mujer detenida a practicarle sexo oral. Para Evans, estos episodios confirman que, en lugares como DeSoto, "el Gobierno federal es la única vía para lograr cualquier cosa".

"Narrativa falsa" e injusticia

El sucesor de Evans, Charles Adams, cerró la investigación en el 2021, alegando que el informe de la Policía estatal, que calificaba a Brown como agresor y sugería que estaba drogado, hacía casi imposible procesar el caso. Según ese reporte, los oficiales actuaron con "medidas apropiadas" y las imágenes respaldaban su versión, pese a mostrar una brutal golpiza.

Sin embargo, el Departamento de Justicia acusó a los agentes de falsificar los reportes, que uno de ellos admitió, fueron inventados para sostener una "narrativa falsa" . Mientras tanto, Brown, semanas después de la agresión, se declaró culpable de "uso no autorizado de un vehículo" y recibió 18 meses de prisión . Y, aunque en el 2021 dijo que "no quería que se hiciera nada" con la paliza, sus abogados hoy reclaman justicia y compensación, luego de que una jueza desestimara inicialmente la demanda, decisión que fue revertida por un tribunal de apelaciones.