El icónico Nokia 1100, reconocido por ser el teléfono móvil más vendido de la historia , aún conserva valor en el mercado de artículos de colección. Aunque su producción fue discontinuada hace años, sigue despertando interés entre nostálgicos y coleccionistas.

Fue lanzado en agosto de 2003 y llegó a vender más de 250 millones de unidades. Su popularidad se debió a su bajo costo, diseño sencillo, batería duradera y una tremenda robustez, características que lo hicieron muy atractivo especialmente en mercados en desarrollo.

Actualmente, se sigue vendiendo en plataformas de compraventa en línea como eBay, y su precio varía dependiendo del estado del equipo y la presencia, o no, del embalaje original.

Este fenómeno refleja un interés sostenido no tanto por sus funciones, sino por el valor

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