Desde el 27 de marzo, el presidente Donald Trump selló el comienzo de su propia “batalla cultural” en Estados Unidos. Mediante una orden ejecutiva, el mandatario prometió “restaurar la verdad y la cordura en la historia estadounidense”, apuntando a reformar museos federales como el Instituto Smithsonian . Entre el acervo cultural e histórico, hay una fotografía que podría dejar de ser exhibida junto a una decena de obras más de distintas colecciones por considerar que “fomentan un sentido de vergüenza nacional” o valores “antiestadounidenses”.

En los ocho meses del segundo mandato de Trump, las exhibiciones artísticas han sido solo uno de los frentes donde la administración ha puesto en marcha mecanismos de revisión. El Instituto Smithsonian , fundado en 1846, se compone de un sis

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