En la ciudad de Somerville (Massachusetts, EE.UU.) se llevó a cabo una insólita contienda electoral para elegir a la mascota que asumiría la 'alcaldía' de una popular cicloruta de un conocido sendero comunitario. Lo que comenzó como una broma entre dos vecinos se convirtió en una verdadera campaña electoral que comenzó en julio y terminó el pasado domingo con la elección de un ganador, recoge la revista People.

Mallory Bissett, dueña de Berry, un gato del vecindario, le había otorgado el año pasado a su mascota el título simbólico de alcalde del sendero, que visita con frecuencia. Luego, Janet McNamara, dueña de un felino llamado Orange Cat, decidió que era hora de desafiar a Berry. Esta decisión provocó que otros dueños de mascotas de la zona comentaran en broma que sus mascotas también merecían una oportunidad.

A lo largo de la ciclovía comenzaron a aparecer pancartas con las fotos de los contendientes y sus respectivos lemas de campaña, en su mayoría cargados de humor, como en una disputa política real. Finalmente, tras dos semanas de votación entre más de 70 candidatos (gatos, perros, pájaros, tortugas y serpientes)  los vecinos emitieron su voto en línea utilizando un código QR y eligieron a la gata Minerva como la nueva 'alcaldesa'. Resulta bastante curioso que el eslogan del peludo haya sido "crimen".

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