Este 20 de septiembre, la Plaza San Martín en Lima se convierte en el epicentro de la marcha “Generación Z”, donde jóvenes, gremios y organizaciones sociales se manifiestan contra el gobierno de Dina Boluarte y el Congreso. La protesta surge como respuesta a la corrupción en el Estado, el aumento de la inseguridad en las ciudades y los abusos del gobierno, que han resultado en la muerte de manifestantes. A pesar de que el Congreso y el Ejecutivo han retrocedido en la reforma de las AFP y han aprobado un nuevo retiro de fondos, los jóvenes exigen transparencia, justicia social y respeto al derecho a la protesta.

La movilización, que se extenderá hasta el 21 de septiembre, ha sido convocada por colectivos como Voz Ciudadana y el grupo 21 de Septiembre, así como por jóvenes independientes. Los organizadores critican la reciente reforma del sistema de pensiones, argumentando que favorece a las AFP y representa un retroceso en los derechos de los trabajadores. "Marchamos contra la corrupción, la mala gestión y porque no queremos que nuestras familias sigan sufriendo las consecuencias de un gobierno corrupto", declaró Luny, dirigente de Voz Ciudadana.

Desde las 5:00 p.m., los manifestantes se concentrarán en la Plaza San Martín y marcharán hacia el Congreso. Se espera la participación de diversos sectores, incluidos sindicatos, transportistas y grupos ecologistas. La Coordinadora Nacional de Derechos Humanos ha habilitado una línea telefónica para reportar detenciones arbitrarias y abusos policiales durante la marcha.

A medida que avanza la tarde, se han reportado cierres de calles que impiden la llegada de algunos manifestantes. La presencia policial es notable en la zona, y los organizadores han instado a los participantes a mantener un carácter pacífico y cívico durante la movilización. Además, han recomendado a los comerciantes y transportistas tomar precauciones para evitar incidentes.

La marcha del 20 y 21 de septiembre se presenta como una nueva oportunidad para que los jóvenes expresen su descontento con la gestión actual y las decisiones del Congreso. Los organizadores han enfatizado que el poder de esta marcha radica en la unidad de los reclamos y en la necesidad de cambios reales en el país.