El desplazamiento forzado de 8 millones de personas desde el campo hacia las ciudades, la frontera norte o incluso hacia actividades vinculadas al crimen organizado, es el saldo social más profundo provocado por la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC) en 1994 .
Frente a esta realidad, la Central de Organizaciones Campesinas y Populares (Cocyp) exige que toda renegociación del T-MEC se someta a una consulta nacional vinculante , con participación directa de quienes han sido más afectados por la migración rural y el desmantelamiento del sector agrícola .
La exigencia fue planteada por José Jacobo Femat , presidente de la central, en el edificio de la Aduana Vieja del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades “Alfonso Vélez Pliego”