¿Por qué ser feliz cuando puedes ser normal? ¿Es acaso el libro con el mejor título del mundo? La respuesta es sí. Esta especie de biografía firmada por la británica Janette Winterson ahonda en las dificultades de una chica adoptada por una pareja de fanáticos religiosos que intenta criar a la niña al tiempo que sobrevive de manera muy precaria en el norte de Inglaterra.
El texto, que arranca bajo el paraguas del género de las memorias, contiene intermitentes reflexiones ensayísticas que permiten transpolar la vida de la autora en la de muchas personas anónimas que no tuvieron la fortuna (o la valentía) para alcanzar una voz pública.
En Winterson, vida y literatura son una sola cosa. Su madre le prohibió leer libros, y cuando ella preguntó el porqué, la mujer lanzó una frase magistral: “