Un Málaga que en ese momento era líder virtual de Segunda tras el doblete de Chupete ante el Granada ha gripado. Dos partidos sin marcar, dos derrotas y la sensación de que tienen que alinearse los astros para marcar un gol. Un Cádiz que fue mejor en la primera parte acabó en su área defendiendo con el equipo de Pellicer empujando y haciéndose acreedor al menos a un punto. Las bajas, obviamente, influyen, no sobra mucho y está fuera medio bloque potencialmente titular, pero ese equipo fresco y que se prometía osado y atrevido en la pretemporada y los primeros compases ahora no existe. Está espeso y no llega por juego, sólo por impulsos y arrebatos. La derrota en el derbi andaluz ante los vecinos gaditanos deja en media tabla en un momento en el que hay que guarecerse y pasar por uno
Málaga CF - Cádiz: Pólvora mojada (0

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