Sé que el ejemplo que voy a escribir lo usé hace varios años en esta misma columna. Lo repito hoy porque nada cambia y, muchas veces, andamos peor que antes. Es el mismo caso que utilizaba cuando dictaba clases o que aún empleo cuando llegan los pichones de periodistas a la redacción del diario o cuando los pelados me buscan para hacer las tareas que les piden en sus universidades.
Es que sigue tan vigente porque los que deben ser el ejemplo –debemos, digo, como para no escurrir el bulto por solidaridad de gremio–, ya sea por lo viejos o por llevar décadas y décadas dando lora en esta vaina, o por su reconocida exposición y referencia mediática, hacen que la mala fama que cubre al gremio sea bien ganada.
Luisa Agudelo, la heroína en la coronación del Deportivo Cali en la Liga femenina: c