Con la llegada de septiembre, la realidad de un nuevo año escolar se hace presente para los niños y sus familias. Regresar a la escuela después de disfrutar de largos y soleados días de verano puede ser motivo de angustia para muchos estudiantes, especialmente para aquellos con alergias alimentarias graves.
Los niños con alergias alimentarias pueden sentirse seguros y confiados en el entorno escolar y más capacitados para aprender, llevando a cabo una preparación adecuada junto con una buena comunicación y colaboración con los maestros, entrenadores de deportes y demás personal.
Como doctora especializada en el cuidado de alergias, aconsejo a los padres con hijos que regresan a clases a tomar estas importantes medidas con el fin de crear conocimiento de la importancia de la educación sob