Redacción/Sol Yucatán
El cenote Dzinup, joya natural del oriente de Yucatán, lleva más de dos décadas secuestrado por intereses empresariales y políticos que lo han convertido en un foco permanente de conflicto. Lejos de beneficiar a la comunidad, el llamado Parador Turístico Xkekén se ha convertido en símbolo de corrupción, despojo e impunidad.
En 2023, el gobierno del exgobernador Mauricio Vila entregó la concesión a una empresa inmobiliaria disfrazada bajo el nombre de “Parador Turístico Xkekén”, por un precio ridículo que indignó a los pobladores.
Desde entonces, la empresa arrastra acusaciones de desfalco, maltrato laboral, despidos injustificados y falta de pago a trabajadores.
Lejos de cumplir con el convenio de 32 cláusulas firmado con la comunidad que incluía pago de agu