La fractura en el bloque de investidura se ensancha. El traspaso de competencias en inmigración a Cataluña que han pactado Junts y el PSOE a cambio del respaldo de los independentistas a los Presupuestos ha prendido una mecha que amenaza con incendiar el frágil equilibrio del mandato de Pedro Sánchez. Esa nueva cesión se debatirá hoy en el Congreso y todo apunta a que terminará en un nuevo revolcón para el Ejecutivo por la negativa de Podemos a dar su apoyo a una iniciativa que consideran «racista».
En una semana clave para chequear la salud de la legislatura, el partido morado estalló ayer contra Junts y su secretario de Organización, Pablo Fernández, calificó de una «auténtica gilipollez» la acusación de estar actuando por «catalanofobia» que les lanzó el secretario general de los postc