WASHINGTON (AP) — El presidente Donald Trump no es médico. Pero el lunes habló como si lo fuera en televisión, ofreciendo consejos médicos no comprobados que según dijo —a menudo sin proporcionar evidencia— podrían ayudar a reducir las tasas de autismo.
Trump imploró repetidamente a las mujeres embarazadas que evitaran tomar el analgésico Tylenol, la marca más vendida de acetaminofén, también conocido como paracetamol. Esto a pesar de que el Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos ha recomendado durante mucho tiempo el acetaminofén como una opción segura durante el embarazo. Incluso opinó sobre cuándo se les deberían dar analgésicos a los niños.
Acompañado por el secretario de Salud y Servicios Humanos, Robert F. Kennedy Jr. —un escéptico de las vacunas—, Trump se abstuvo de op